Esta semana sin duda ha reinado un ambiente de muchos cambios. La vida sigue su curso, para algunos de nosotros no es más que una secuencia de lo que ya había antes, y aunque eso sonara aburrido la verdad es que no es así. La vida se compone de momentos, pero si unos están ligados a otros, así como al momento que le antecede, entonces siempre serán días distintos. Como cuando el agua de un río corre, aunque parezca igual siempre es distinta a la anterior. Ayer Juanma me contó algo que me estremeció mucho; una pareja que era un ejemplo de amor y de linda convivencia ha quedado separada por el adiós definitivo que otorga la muerte Quizás en este caso sea relativo, justamente esta semana hablamos mucho de la duración del amor en las parejas. Según la ciencia dice que son oficialmente 3 meses, hay quienes son menos crudos y dicen que el amor va y viene cada 6 y así le van variando a la sentencia de que el amor eterno es un cuento para hacer babear a los soñadores, pero que pasó con esta pareja? Será la muerte capaz de separarlos aunque ahora él quiera seguirla? Así es nuestros muy queridos lectores, ella murió, y para él, la vida ha terminado de cierta forma, podemos seguir respirando después del amor, de eso no cabe la menor duda, pero vivir... eso si nadie puede garantizarlo. Yo a esta pareja no la conozco de nada, sin embargo son este tipo de cosas las que nos hacen ver que tan susceptibles podemos ser a simplemente desaparecer sin un previo aviso y sin haber concluido parte de esta existencia : ( aunque estemos en el mejor momento de nuestras vidas. También esta semana nos enteramos que se nos fue uno de los amigos más simpáticos que tuvimos, y con él sin duda varios de los chicos del 2009 (nombre que recién acabo de pensar para este círculo de amigos entrañables que nos conocemos desde el año pasado y con quienes hemos compartido tantas cosas ya) nos dimos cuenta de la fragilidad de la vida. Todo sucedió de manera muy sorpresiva, y nadie tuvo la oportunidad de decirle a Robert lo que significó en nuestras vidas y aventuras, por llamar así a esos buenos ratos que pasamos a su lado y gracias a él. Nuestra querida Carol hoy dio un gran paso a algo que deseaba y se merecía y pronto la tendremos con nosotros de regreso, más contenta y renovada; y Vic parece que va entendiendo el ritmo de algunas cosas que se mueven bajo el cielo sin tener que preguntarse por que están sucediendo de esa manera, su corazón solo se abre y eso por un lado está muy bien. Por otro lado, la pequeña Checha también avanza en la vida, ya menos estresada que antes y me ha anunciado que si todo sale bien, en un mes la tenemos ya graduada, es una alegría cuando alguien está a punto de concluir con algo tan importante en la vida : ) En cuanto a Juanma y a mi, la vida nos pinta genial, aunque aún sigo sin empleo, y es algo que me tiene bastante agobiada, el amor va sobre ruedas, quizás ya hasta le salieron alas, no me sería raro pues con esta semana tan romántica la verdad es que todo puede pasar. Estamos ya con el entusiasmo diario, de que se acerca el día de estar juntos otra vez, y eso por un lado nos tiene felices, pero por otro, desesperados por que ese día llegue ya mismo : P Espero que lo sepamos llevar bien, hasta ahora los días son fantásticos, pero como cometamos el error de vivir para eso en lugar de disfrutarnos como lo hemos hecho hasta ahora, quizás arruinemos un poco esta historia de amor que es única y que ha venido a darle un extraplus para convertirla en un verdadero ensueño para ambos, así que aunque todo esta semana haya estado lleno de cosas buenas y cosas muy tristes, nos damos cuenta que hay que seguir andando, el camino es largo y la vida corta, y yo tengo clara una cosa, quiero vivirla entera a su lado : D A todo esto quiero agregar la frase de la semana, que va dedicada a la memoria de ese hombre bondadoso y gracioso que fue el querido "TIO ROBERT" que allá donde se encuentre, espero que lo esté pasando muy bien y que sepa que lo extrañamos. : ) "Cuando mi voz calle con la muerte, mi corazón te seguirá hablando" Rabindranath Tagore.